En el invierno del 93, un equipo de ocho biólogos marinos puso en marcha una expedición al archipiélago de Zanzíbar. El plan que tenían los biólogos era pasar los siguientes seis meses estudiando la fauna autóctona en las distintas islas del archipiélago, pero el océano índico tenía preparado otro destino para ellos. Antes de llegar a las islas de Zanzíbar, una fuerte tormenta azotó los mares y destruyó por completo el sistema de motores del barco, obligando a los biólogos a coger los botes salvavidas para aterrizar en la isla más cercana.
Todos los hombres sobrevivieron, pero a partir de ese momento los biólogos se encontraban perdidos en una isla desierta que ni siquiera parecía en los mapas geográficos y no había ninguna forma de pedir rescate. Durante la primera semana los biólogos se encontraban con la moral alta y con esperanzas de que vinieran a buscarlos. Pero en la segunda semana los pocos suministros que tenían se agotaron y el caos de la atención empezaron a vivarse en menos que canta un gallo.
Raúl Jiménez, el marinero que pilotaba el barco, sabía que tenía que tomar las riendas de la situación para dirigir el futuro de la supervivencia del grupo. Sin ningún temor se adentró en la selva de la isla y no apareció hasta el día siguiente. Cuando volvió a la costa con los demás hombres trajo frutas y bayas suficientes para que todo el equipo comiese.
Lo cual dejó impresionado a los biólogos. Al día siguiente repitió el mismo proceso pero esta vez los biólogos decidieron acompañarle. El hecho de que el marinero diese el primer paso por el equipo hizo que los biólogos confiásen en él en unas futuras decisiones. Raúl se había convertido en el líder del grupo. Desde el primer momento Raúl estableció la cultura de protegerse mutuamente, es decir pasar del yo sobreviviré a todos sobreviviremos.
Para ser coherente con ello él mismo cedía gran parte de su ración de comida a los miembros que se encontraban en peor estado. A la hora de distribuirse las tareas había varios hombres que se encontraban con gran ansiedad y era muy arriesgado enviarles a buscar comida. Por eso Raúl les ordenaba tareas más fáciles como construir camas para el equipo o vigilar por si aparecía algún barco cerca de la isla.
Así sentían la satisfacción de sentirse útiles aumentando su dopamina y disminuyendo el cortisol. Durante la noche se reunían todos alrededor de un fuego para hablar y consolarse mutuamente. Esto hacía que los niveles de serotonina conocida como la hormona de la felicidad se mantuviesen elevados y así tuviesen más fuerzas para afrontar el siguiente día.
Además Raúl aprovechaba esos momentos de tranquilidad para conocer mejor a los miembros del grupo. Él necesitaba crear relaciones de amistad con cada uno de ellos para así garantizar que ellos confiasen en él incluso en los peores momentos. A lo largo de la siguiente semana Raúl y el equipo empezaron a construir una balsa con la intención de navegar en el caso de que no recibiesen ningún aviso de rescate en las próximas dos semanas.
Navegar en balsa era muy arriesgado pero Raúl necesitaba que los biólogos viesen que el esfuerzo que estaban poniendo en construir la barca tendría un impacto real y les ayudaría a salir con vida de la isla. Por suerte no les hizo falta utilizar la balsa. Tres días antes de zarpar un barco pesquero que bordeaba la isla se percató de los supervivientes y los sacó de allí.
Meses más tarde la historia de los biólogos se hizo viral en todo el mundo. Raúl fue considerado como un héroe por muchos y diversas empresas querían que contase su historia para inspirar a sus directivos y empleados a ser un mejor equipo. Unas de las palabras que Raúl dijo en su primera entrevista fueron el El liderazgo no es una licencia para hacer menos, es la responsabilidad de hacer más.
Ser un líder es igual que ser padre porque consiste en comprometerse con el bienestar de aquellos a los que cuidamos. La historia de Raúl es fascinante y está inspirada en los valores y principios de uno de los mejores libros escritos sobre liderazgo.
En él encontrarás grandes consejos para ser el líder de tu grupo y las cinco lecciones clave del liderazgo. Un saludo.